jueves, 10 de mayo de 2012



La felicidad.
Qué es la felicidad?
¿Porqué preguntamos "qué es la felicidad"? ¿Es ese el enfoque correcto? ¿Es la correcta manera de investigar? No somos felices. Si fuéramos felices, nuestro mundo sería por completo diferente, nuestra civilización, nuestra cultura, serían total y radicalmente distintas. Somos seres humanos infelices, triviales, carentes de valor, peleadores, vanos, nos rodeamos de cosas inútiles, nos satisfacemos con ambiciones mezquinas, con el dinero y la posición social. Somos seres desdichados, aunque podamos poseer conocimientos, dinero, casas ricas, muchos hijos, automóviles, experiencia. Somos seres humanos tristes, sufrientes, y debido a que sufrimos, deseamos la felicidad; y así nos dejamos arrastrar por aquellos que nos prometen esa felicidad, social, económica o espiritual.
¿De que sirve, cuando estamos sufriendo, preguntar de qué sirve la felicidad? ¿Podemos comprender el sufrimiento? Ése es nuestro problema, no cómo ser felices. Somos felices cuando no estamos sufriendo: debemos, pues, comprender qué es el sufrimiento. Pero, ¿Podemos comprender qué es el sufrimiento cuando una parte de nuestra mente está escapando en la búsqueda de la felicidad, de una salida para la desdicha?

martes, 17 de abril de 2012

Mariposas en la panza!!!

Todaas crecimos con  cuentos de hadas en los que la princesa encontraba a su príncipe azul y comían perdices(nunca entendí por que comían perdices, y no otra cosa, por que, para el caso cualquier princesa hubiera preferido comer bombones o sanguches de miga).
Y eso no es todo, La cosa se pone peor. Vivimos nuestra adolescencia mirando novelas en las que todos los personajes son igualmente bellos y delgados, con pieles de porcelana y peinados de peluquería hasta cuando recién se levantan, y se la pasan encontrando al amor de sus vidas varias veces por temporada.
Mas adelante, nos hacemos adictas de las comedias románticas y nuestra cabeza se llena de estereotipos: hombres perfectos y chicas lindas e inteligentes que se encontraban en las circunstancias más ridículas y terminaban juntos y felices por siempre, con beso en un día de sol y violines de fondo. Hasta Bridget Jones, gordita, borracha y fumadora encontraba a su Mark Darcy soñado.
Pero los cuentos, las novelas y las películas son simplemente eso: historias. Entonces lo que da miedo es que el príncipe azul que tanto buscamos sea solo una fantasía y que todas nos quedemos solas por esperar algo que en realidad no existe. Y ahí es cuando pienso ¿No nos merecemos algo mejor?¿Por que conformarse con menos? ¿Existirá el hombre perfecto? Ahy, ojalá que sí...

miércoles, 4 de enero de 2012